Actualmente estamos viendo cómo nuestras cocinas están ganando cada vez más protagonismo. El diseño y la arquitectura de nuestras casas avanza con las nuevas tecnologías y con ella la distribución y el aprovechamiento de esta.
Estamos viendo una gran evolución hacia las nuevas utilidades de las cocinas. Cada vez más personas apuestan por convertirlas también en comedor. Ya no solo hablamos de integrar la cocina en el comedor, sino, utilizarla con ese fin.
Más allá de las ventajas y desventajas, de las cuales hablaremos más adelante, lo que queda claro es que las cocinas están siendo diseñadas para ahorrar metros y convertirlas en verdaderas zonas de reunión familiar y de amigos.
La clave está en elegir bien la distribución y la decoración, para convertirlo en un ambiente agradable. Para ello, no hay nada mejor que elegir unos buenos distribuidores que se encarguen de aconsejarte de cómo aprovechar mejor esta estancia de la casa. Unas encimeras con estilo, un suelo adecuado y unos elementos diferenciadores.
Aún con todo esto, sigue habiendo muchas personas que prefieren mantener la utilidad clásica de la cocina y tenerla muy diferenciada del comedor. Por lo tanto, ¿Dónde es mejor comer? No hay una respuesta clara, pero sí existen varias ventajas y desventajas según lo que elijas:
Ventajas de comer en la cocina
- Mayor eficiencia: El aprovechamiento del tiempo si comemos en la cocina es mayor. Incluso, si nuestra comida consta de varios platos, podemos comer de forma progresiva.
- Fácil limpieza: Uno más uno es igual a dos. Si solo tenemos una estancia en la que hemos trabajado, la limpieza será mucho más fácil que si también debemos de hacerlo con el salón.
- Generación de buen ambiente: La cocina es un lugar muy agradable para realizar reuniones. Para esto, tenemos que tener en cuenta los pasos anteriores como la buena elección de las encimeras o la decoración.
- Comodidad y rapidez: Junto a la eficiencia, se añade comodidad y rapidez para montar tu comida familiar.
Desventajas de comer en la cocina
- Tendencia a cocinar más rápido: Uno de los mayores problemas, es que se suele asociar el comer en la cocina con querer ganar tiempo. Es por esto, que las comidas pueden llegar a ser menos elaboradas.
- Menor relajación: Otro aspecto a tener en cuenta es que en el salón se está más cómodo por regla general. Es el lugar en el que solemos tener las charlas familiares o con amigos. Este punto simplemente es cuestión de generar una nueva costumbre.
- Estancamiento: Cocinar y no cambiar de localización puede ser un inconveniente. En muchas ocasiones, puedes preferir cocinar en la cocina y comer en el salón. Una buena combinación de esto, serían las cocinas integradas en el salón.
- Olores: En el caso de que tengas un buen extractor de olores, no debe haber ningún problema. Pero si no es el caso, puede llegar a ser molesto.
Sea cual sea tu preferencia, queda claro que la cocina es un lugar en el que hay que cuidar cada detalle. Es una estancia muy importante de nuestra casa. Aquí es donde empiezan los mejores momentos.