Estamos acostumbrándonos a cocinas con pocas ventanas propias, ya que cada vez se están construyendo teniendo en cuenta una integración total con el resto de la casa. A priori, puede parecer un inconveniente, pero no lo es en absoluto, ya que existen diferentes ideas que te ayudarán a mejorar la iluminación de tu cocina sin renunciar a todos los aspectos positivos que te proporciona la flexibilidad y la integración.
Integra tu cocina con el salón, la mejor forma de llenarla de luz
Sitúa tu cocina integrada completamente en el salón para aprovechar la luz natural que entra en el espacio más importante de tu vivienda. Esto unido a placas de inducción y jugando con la iluminación artificial, hará que consigas que tu cocina quede iluminada y sea un lugar agradable y cómodo para poder cocinar y comer.
Aprovecha los utensilios de cocina y la decoración
La iluminación también es cuestión de percepción, por lo que, si colocas los elementos de tu cocina y su decoración de una forma estratégica, podrás conseguir una sensación mayor de luminosidad.
Colores más claros, blanco y madera
El blanco o la madera para el mobiliario o las piezas que conforman tu cocina pueden ser un punto diferencial, ya que transmiten de mejor forma la luz natural y la artificial si se combina de la forma correcta. Este punto no solo ayuda a ganar luminosidad, sino que, además, generará una sensación de mayor amplitud.
Añade luz artificial en puntos menos iluminados
Hay muchas ocasiones en las que, por distribución será inevitable que queden puntos de tu cocina en los que la iluminación se vea reducida. No es ningún problema, ya que puedes añadir luz artificial, por ejemplo, con dispositivos LED que harán que se equilibre por completo y toda la cocina tenga una sensación de unidad en cuanto a iluminación. Además, puede servirte para dar énfasis en puntos que te interese que ganen protagonismo, ya que podrás regular la intensidad de la luz.
Los detalles pueden marcar la diferencia
Este punto no solemos tenerlo en cuenta, pero puede transformar la iluminación de tu cocina con unos pocos elementos. Por ejemplo, eligiendo una vajilla blanca y clara, puede actuar como espejo de la luz. Esto, sumado a la mantelería, la cristalería y los toques como grifos cromados, pueden ser los pequeños cambios que acaben de dotar a tu cocina de la luz que estás buscando.
Ahora que ya conoces estos trucos para aumentar la iluminación de tu cocina, ¿por qué no te decides por integrar tu cocina en el salón y ganar en luz y espacio? Contacta con nosotros y te contamos cómo adaptarla a tu casa y puedas disfrutar de la comodidad y del diseño de las cocinas de Invite cocinas.